Comerciantes piden fiscalización por útiles escolares de mala calidad

Presidente del Comercio Detallista de Temuco espera acción rigurosa.

“La seguridad que los niños no van a resultar intoxicados o heridos por un artículo escolar de mala calidad o que no cumple con los estándares exigidos por la ley, depende de fiscalizaciones rigurosas con el comercio en general, pero también con los llamados Mall Chinos y con los vendedores ambulantes; y que los consumidores consideren con seriedad dónde van a hacer sus compras, revisando de manera responsable lo que están adquiriendo”.

Así lo expresó el presidente de la Cámara de Comercio Detallista de Temuco, René Inzunza, quien agregó que, de acuerdo con los estudios que ha realizado el Sernac, hay productos realmente contaminantes o peligrosos por su materialidad, que están siendo vendidos, como, por ejemplo, plasticinas, acuarelas o lápices de cera, que contienen plomo, en mayor cantidad que la autorizada, u otros artículos escolares que no tienen la resistencia requerida y terminan quebrándose, poniendo en riesgo de heridas o cortes, a los niños más pequeños.

PEGAMENTOS

“También se debe tener cuidado con algunos pegamentos, prosiguió Inzunza, que contienen tolueno, ya que los profesionales médicos han señalado que, por contacto prolongado, este producto puede provocar daños neurológicos permanentes en niños menores de 3 años.

Con respecto a los potenciales peligros mecánicos en los útiles escolares, el dirigente expresó que se recomienda tener cuidado con los productos rotos, ya que no es que solo dejen de servir, sino que pueden transformarse en fuente de cortes o heridas, también en los más pequeños. “Por esto, dijo, hay que tener especial cuidado cuando se compra, por ejemplo, reglas, escuadras, compás, cuadernos con espirales, entre otros, ya que, si se rompen, por no tener la calidad que debería garantizar el producto, pueden terminar hiriendo o atragantando a un menor.

Por último, el presidente de los comerciantes de Temuco indicó que el rotulado de los artículos escolares que entran al mercado chileno debe estar expresado en idioma castellano, de forma legible y que informe sobre las características del producto, declarando la condición de no tóxicos o atóxicos cuando corresponda.