Senadora advierte que organizaciones terroristas podrían ampliar control territorial en La Araucanía

Parlamentaria señala que lo ocurrido hace unos días con el corte de rutas en varios puntos de Malleco en un claro llamado de atención de lo que puede ocurrir. “Si una Organización de Resistencia Territorial fue capaz de paralizar una provincia completa durante varias horas, ya nos podemos imaginar lo que sucedería si las siete ORT que existen decidieran actuar en conjunto”, afirma.

Como un poderoso llamado de alerta calificó la senadora Carmen Gloria Aravena, a los últimos hechos registrados en la Macrozona Sur, y en particular, en la Provincia de Malleco, donde a comienzos de semana el denominado grupo “Resistencia Mapuche Malleco”, cortó diversas rutas e incendió vehículos en esa provincia de La Araucanía, afectando la conectividad terrestre de los habitantes de esa zona de la región.

Para la parlamentaria, lo ocurrido es una situación de máxima gravedad y una constatación de la capacidad operativa que tienen las siete organizaciones de resistencia territorial (ORT) que existen en la Macrozona Sur, “donde una sola de ellas fue capaz de poner en jaque a toda una provincia cortando las rutas de acceso y salida, sitiando por algunas horas ese territorio y manteniendo prácticamente como rehenes a sus habitantes”.

En esa línea, la senadora Aravena agrega que “aquí estamos en presencia de grupos bien preparados, entrenados, con una clara planificación y objetivos concretos, que a diferencia, de este gobierno, no improvisan en lo que están haciendo, y que seguirán escalando la violencia hasta lograr lo que se proponen. Las acciones que realizan estas organizaciones no pueden seguir siendo calificadas de violencia rural, porque se trata de grupos paramilitares, que mantienen un alto poder de fuego, muy superior al de las policías, y por lo tanto, no se trata de delincuencia común, sino que de terrorismo”.

Lamentablemente, puntualiza la congresista, “los habitantes de la Macrozona Sur llevan 25 años padeciendo esta verdadera tortura, este cáncer que se instaló en La Araucanía y el Biobío, que durante todo este período ha provocado un inmenso dolor, y que mantiene atemorizada a la población mediante asesinatos, usurpación de tierras, destrucción de bienes públicos y privados, narcotráfico y robo de madera, entre otros delitos de la mayor gravedad”.

Carmen Gloria Aravena hizo hincapié en que “la mayoría de las 2.500 comunidades indígenas emplazadas en esta parte del país son pacíficas, y sólo un grupo muy minoritario pero efectivo, ha optado por las armas para imponer sus términos y demandas. Como sociedad entendemos que hay reivindicaciones y necesidades que resolver, pero ellas no se pueden solucionar por la vía violenta, como lo hacen estos grupos terroristas, que además, no les interesa esas reivindicaciones, sino que continuar con sus negocios ilícitos, ya que son bandas criminales dedicadas a eso”.

“Lo más delicado de todo esto, y que parece no estar entendiendo el gobierno, es que si el Estado no enfrenta y desarticula pronto a las organizaciones terroristas que operan principalmente en La Araucanía y Bibío, existe el riesgo de que amplíen el control territorial en la región, ya que si una sola agrupación fue capaz de paralizar y aislar a una provincia, que ocurrirá el día que las siete ORT que existen opten por actuar de manera conjunta; ese día se tomarán La Araucanía completa”, expresó la parlamentaria.

Aravena concluyó haciendo un emplazamiento al Gobierno a recoger este llamado de alerta y definir un plan de acción para desmantelar y detener a los integrantes de estos grupos terroristas “antes de que sea demasiado tarde”.