Renaico brindó masiva recepción al carabinero asesinado en Chillán

Breant Washington Rivas Manríquez, de 23 años de edad y oriundo de esa comuna de Malleco, fue asesinado durante un procedimiento policial en Chillán.

Poco antes de las 22 horas de este jueves arribó a Renaico el cortejo fúnebre con los restos del carabinero Breant Washington Rivas Manríquez, de 23 años, quien fue asesinado durante un procedimiento policial ocurrido en Chillán, al recibir al menos dos disparos por la espalda, propinados por un menor de edad.

El hecho se produjo cerca de la 1:30 horas del mismo día, cuando el personal policial realizó un control vehicular a un automóvil en el que se trasladaban dos sujetos, quienes aprovechando un descuido de los uniformados intentaron darse a la fuga.

Fue en ese instante que Rivas inició una persecución a pie y logra detener a uno de los antisociales, sin embargo, un tercer individuo llegó al lugar y extrajo un arma, con la que realizó una serie de disparos contra el uniformado, los que le provocaron la muerte. El jefe de patrulla debió utilizar su arma de fuego para repeler el ataque y el antisocial falleció en el lugar.

HOMENAJE
El crimen provocó conmoción en Renaico, comuna de la que era oriundo el uniformado, quien tenía casi tres años de servicio en Carabineros y deja un pequeño hijo de apenas dos meses.
El funcionario municipal Washington Rivas, padre de Breatn, se mostró desconsolado ante lo ocurrido, dijo que “lamentablemente, un amigo de lo ajeno que está mejor preparado que Carabineros me lo sacó de las manos, me lo quitó”.

“Era mi único hijo y a él le gustaba su institución. Ahora quedé como los carabineros, con los brazos cruzados. Más que un héroe, es un mártir”, añadió, destacando que “el problema es la libertad que tienen los delincuentes para andar portando armas. Pero un carabinero abate a un delincuente, lo juzgan, lo atacan, lo destituyen y los meten presos”.

Luego de un responso realizado en la Catedral de Chillán, los restos de Breant Rivas fueron trasladados a su comuna natal, donde lo esperaba una multitud de vecinos frente a la tenencia de Carabineros, entre ellos los cuequeros locales, quienes recibieron el féretro con nuestra danza nacional en homenaje al fallecido policía, quien también era amante de la cueca.

Mientras vecinos agitaban pañuelos blancos, el cortejo se dirigió escoltado por miembros del club de huasos, quienes lo acompañaron a caballo hasta la sede de la población Los Conquistadores, para ser velado.

Asimismo, el municipio de Renaico decretó tres días de duelo comunal, ante el dolor que aflige a toda la comunidad por lo sucedido.