Un nuevo paso en el objetivo de consolidarse como uno de los principales actores a nivel mundial en el mercado de los envases sustentables dio CMPC esta semana, tras anunciar la compra de los activos forestales e industriales de la empresa brasileña Iguaçu, dedicada a la fabricación de celulosa, papel y sacos.
La operación involucra 945,7 millones de Reales e incluye los activos industriales y forestales que Iguaçu posee en los estados de Paraná y Santa Catarina. Con esta adquisición, CMPC totalizará una capacidad de producción anual de sacos de 1,5 billones de unidades, lo que nos permitirá satisfacer de mejor forma las necesidades de nuestros clientes en Norte, Centro y Sudamérica, ubicándonos como el segundo actor de este rubro a nivel mundial.
“Los embalajes provenientes de fibras naturales son los envases del futuro, por tratarse de productos que son amigables con el planeta, reciclables y en ocasiones disgregables, con una muy baja huella, por lo que seguir creciendo en este rubro es muy relevante para el negocio de CMPC y sus metas de sostenibilidad”, dijo el gerente general de Empresas CMPC, Francisco Ruiz-Tagle.
Las instalaciones de Iguaçu ubicadas en los estados de Paraná y Santa Catarina (Piraí do Sul, Sao José dos Pinhais y Campos Novos) suman una capacidad de fabricación anual de 105 mil toneladas de celulosa, 120 mil toneladas de papel Sack Kraft, 500 millones de unidades de sacos y 21 mil toneladas de papeles especiales.
Además de la producción de sacos en dichas instalaciones, CMPC aprovechará la capacidad adicional de producción de papel Sack Kraft, para cubrir sus requerimientos en Chile, Perú, Argentina y México, que actualmente utilizan insumos importados de terceros.
La operación involucra, además plantaciones de pino por un volumen aproximado de 1,9 millones de metros cúbicos.
Esta compra se suma a la que CMPC realizó en 2020 en su negocio de Biopackaging en México y a las importantes inversiones para modernizar sus plantas en Chile, Perú y Argentina.
SOBRE IGUAÇU
Iguaçu Celulose, Papel S.A. fue creada en 1943, como una pequeña maderera ubicada al interior de Santa Catarina.
En la década del 70 entró al negocio de la celulosa y el papel con la adquisición, en 1971, de la fábrica Celupel S.A, en Santa Catarina. Al año siguiente, fue adquirida la unidad industrial de Campos Novos, ubicada en el mismo estado.
Para contar con materia prima para producir papeles del tipo Kraft, se adquirió otra unidad industrial, ubicada en el municipio de Piraí do Sul, aproximadamente a 190 km de Curitiba, capital del Estado. En esa misma época, se adquirió también una unidad industrial en la ciudad de São José dos Pinhais, productora de de papeles especiales, a partir de celulosa blanqueada fibra corta.
La materialización de la transacción se encuentra sujeta a procedimientos administrativos habituales de estas operaciones, entre ellos la autorización por parte del Conselho Administrativo de Defensa Económica (“CADE”).
