Dos ataques incendiarios se registraron con pocas horas de diferencia en Temuco y Galvarino

En el último atentado, encapuchados efectuaron una serie de disparos.

Con aproximadamente tres horas fueron perpetrados dos ataques incendiarios en Temuco y Galvarino.

Según trascendió recién en la mañana de este lunes, faltando pocos minutos para la medianoche del domingo, fueron quemadas las instalaciones del fundo Pelahuenco, propiedad de Eduardo Klagges Bachmann en Galvarino.

En ese lugar fueron quemados un galpón, dos tractores, trigo, lupino y herramientas.

Posteriormente, a eso de las 3.20 de la madrugada de este lunes, un grupo de encapuchados armados llegó hasta el fundo Pumalal, a la altura del kilómetro 28 del camino La Serena, en Temuco, muy cerca del límite con Galvarino.

Testigos relataron que los encapuchados efectuaron una serie de disparos y luego rociaron con combustible 11 de las máquinas forestales que desarrollan faenas en ese sector, pero lograron encender solo seis de ellas, las que fueron consumidas por el fuego.

El fiscal de turno del Ministerio Público, Miguel Ángel Rojas, confirmó que las máquinas recibieron una serie de impactos con armas de fuego, los que son periciados por detectives.
Alex Reidell, propietario de las maquinarias, avaluó en más de $400 millones las pérdidas ocasionadas por este atentado, al que concurrió personal de Bomberos de Temuco para sofocar las llamas.

En el lugar, fueron hallados panfletos firmados por la ORT- CAM y donde se exige la libertad de Daniel Melinao y la retirada de las empresas forestales.

VICTORIA
A estos ataques se suma el ocurrido en la madrugada de este domingo, en una antigua vivienda deshabitada a la altura del kilómetro 9 de la ruta Victoria- Curacautín, en el fundo Los Placeres, perteneciente a la familia Schmaldfeldt.

El comisario Alejandro Pino, jefe de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (Bipe) de la PDI de Angol, precisó que se confirmó la participación de terceras personas en el hecho, por cuanto el inmueble no tenía fuentes calóricas que hagan presumir que el fuego se haya iniciado en forma accidental.

Producto de la destrucción completa del inmueble, no fue posible localizar el punto exacto de inicio de las llamas, no encontrándose tampoco lienzos ni panfletos que reivindiquen la autoría, precisó el oficial, agregando que la vivienda tenia aproximadamente 100 metros cuadrados, estaba construida de madera y no existen seguros comprometidos.

En tanto, el abogado de la familia afectada, había denunciado públicamente hace algunas semanas que existían amenazas por parte de una comunidad mapuche, que los instaba a vender el predio a la Conadi o de lo contrario quemarían la propiedad.

Imágenes: Juan Anabalón