SAG liberó 2 mil insectos biocontroladores para disminuir plaga forestal en La Araucanía

La avispa taladradora de la madera del pino es la principal plaga de las coníferas presente en el país.

La Megarhyssa nortoni, es enemiga natural de la plaga forestal Sirex noctilio.

El Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) informó que liberó en La Araucanía 1800 ejemplares de Ibalia leucospoides y 200 Megarhyssa nortoni, ambos insectos enemigos naturales de la plaga forestal Sirex noctilio, conocida también como avispa taladradora de la madera del pino.

Los ejemplares provienen de los insectarios de producción de biocontroladores que posee el SAG en las regiones de Los Ríos y Los Lagos, los cuales son abastecidos con trozas de distintos predios de las áreas cuarentenadas, trabajo que es realizado en conjunto con el sector privado.

La coordinadora forestal del SAG Araucanía, Maritza Schafer, dijo que “el control biológico es un método que se utiliza para el control y supresión de plagas y que consiste en aumentar artificialmente la población de enemigos naturales de una plaga, con el fin de producir una mayor tasa de ataque y con ello una disminución de la población del agente productor de daños, en este caso el Sirex noctilio. El control biológico se está aplicando en situaciones donde el control natural de un insecto está ausente o bajo y en áreas de avance de la plaga dentro de la cuarentena”.

La directora regional del SAG, María Teresa Fernández, sostuvo que “esta actividad forma parte del Programa de Control Oficial de Sirex noctilio que el SAG ejecuta en todo el país y que tiene por objetivo contener y disminuir en forma natural las poblaciones de la avispa taladradora del pino”.

Fernández agregó que “resulta importante que la comunidad conozca la labor que cumplen estos controladores biológicos porque si bien podrían intimidar a las personas por su tamaño y presencia son inofensivos para el ser humano y de gran utilidad para el control de plagas”.
La coordinadora forestal agregó a lo anterior que, Ibalia leucospoides y Megarhyssa nortoni, son especies específicas para el control de Sirex noctilio, no atacan a otros insectos endémicos que existan en el país, ni a otros animales, tampoco provocan efectos negativos en la naturaleza”, puntualizó la profesional.

De acuerdo a lo precisado por el SAG, la avispa taladradora de la madera del pino se caracteriza por atacar árboles debilitados y cuando existen altas poblaciones de este insecto podría provocar la muerte de todo un rodal, razón por la cual, el objetivo principal de estas medidas de control biológico son mantener bajos los niveles poblacionales de la plaga para así evitar pérdidas económicas.

El Sirex noctilio, es la principal plaga de las coníferas presente en el país y que amenaza a las plantaciones de Pino insigne (Pinus radiata D. Don), especie que abastece gran parte de la industria forestal nacional. El SAG declaró bajo control oficial esta plaga, al detectarse por primera vez en el país el año 2001. Actualmente se encuentra presente en plantaciones ubicadas entre las regiones de Valparaíso y Aysén y se está trabajando fuertemente con control biológico.