Preocupados se encuentran vecinos y comerciantes del sector céntrico de Angol, quienes desde aproximadamente tres semanas han venido sufriendo reiterados cortes de energía eléctrica, los que, pese a ser informados a la empresa Frontel, no han logrado ser solucionados.
Las anomalías afectan principalmente a los residentes de calle Pedro Aguirre Cerda con Colipí y sus alrededores, los que incluyen el conservador de Bienes Raíces, la escuela, dependencias municipales, comerciantes y viviendas particulares e incluso los semáforos de Caupolicán con Pedro Aguirre Cerda, sumando cerca de medio centenar de usuarios en total, quienes desde hace poco más de tres semanas que vienen sufriendo reiterados cortes de energía eléctrica durante el día, hasta tres veces diarias y cuya duración se ha prolongado hasta por más de tres horas.
María Angélica Tobar, comerciante del sector expresó que “esta es la tercera semana consecutiva que se corta la luz. Nosotros hacemos el reclamo correspondiente, incluso ya hemos recurrido a llamar a la radio para apurar la reposición, pero aun así seguimos con problemas. Yo trabajo con fotocopias, con máquinas para café, máquina de helados, de bebidas, conservadoras, y todas necesitan energía eléctrica, por lo que un corte de luz me impide trabajar y además peligro de perder mercadería como los helados y otros. Yo soy una trabajadora independiente y vivo de lo que gano, por lo que este tipo de cortes de energía eléctrica me perjudica mucho”.
La comerciante agregó que se encuentran molestos porque pese a los reiterados reclamos, no han obtenido solución, agregando que les han dicho que es un tema de sobreconsumo, pero ha quedado solo en explicaciones.
PÉRDIDAS
“Solo hemos logrado que nos den algunas explicaciones, pero nada más y los cortes continúan a diario. Yo si no puedo trabajar no gano dinero para pagar las cuentas. Si yo el día de mañana llegó a Frontel y no les pago la cuenta, manifestándoles que he ganado poco por los cortes de luz ¿me van a perdonar la deuda? no lo creo”, manifestó.
La mujer enfatizó que vive en constante riesgo de perder alguna de sus máquinas, ya que cada vez que se le corta la luz ella debe desconectar todo para evitar algún tipo de daño cuando la energía vuelva, con el temor que alguna se le quede enchufada y se queme.
Por Rodrigo Zurita.