Ingenieros aseguran que los Queltehues pueden predecir los sismos hasta con un minuto de anticipación

Hallazgos del proyecto "Sysmos Home" se basan en el Vanellus Chilensis, ave que habita en Chile, Perú y Argentina, y a los que los mapuches ya le asignaban poderes sobrenaturales.

Hasta con 60 segundos de antelación se podría avisar un sismo de importancia según un grupo de ingenieros que creo el proyecto “Sysmos Home”, el que tiene como origen de la información el Queltehue (Vanellus Chilensis), ave que habita en Chile, Perú y Argentina, y a los que los mapuches ya le asignaban poderes sobrenaturales.

La iniciativa está a cargo de Ariel Césped (ingeniero mecánico) y Sebastián Toso (ingeniero en automatización de Villa Alemana), y basan su éxito en los graznidos ruidosos de los Queltehues. cuando supuestamente iba a ocurrir un terremoto.

Ambos ingenieros optaron por ciencia al natural y efectuar mediciones en las zonas que frecuenta el Queltehue. Sustento: demostrar científicamente que este animalito evolucionó con la capacidad natural de percibir las ondas de ultra-baja frecuencia (0.0001Hz) que anteceden a los sismos.

La que califican en Sysmos (cuya producción está a cargo de la empresa Tectronix, en Viña del Mar) de “asombrosa experiencia” les permitió desarrollar un novedoso receptor de alertas sísmicas, el módulo Sysmos Plus, que notifica, sostienen, cuando va a ocurrir un terremoto. “Hasta con un minuto de anticipación. Pareciera que no es mucho tiempo, pero los segundos pueden marcar una diferencia en una catástrofe”.

De acuerdo a un reportaje del diario La Estrella de Valparaíso, Césped explicó que “los sismos se pueden detectar con anticipación”. Esto partió hace cuatro años, tras el terremoto de Iquique. Ariel Césped añade que en ese tiempo “la gente empezó a cuestionarse por qué no había sistema de alerta sísmica temprana aquí en Chile”.

DETECTORES
Los profesionales agregaron que “se nos ocurrió instalar detectores de ondas primarias en un potrero donde había una colonia de Queltehues. Cuando ocurrían temblores, podíamos registrar el evento, la onda sísmica. A la vez, pusimos cámaras para ver si los pájaros también detectaban la onda. Y efectivamente, cuando ocurría el temblor, nosotros detectábamos el sismo y los Queltehues empezaban a gritar”.

Así instalaron sensores en las zonas sísmicas. “Detectaban un temblor, nos enviaban notificaciones al celular. Nos empezó a ir bien. Integramos las notificaciones a las redes sociales… cada vez que temblaba, las personas activaban notificaciones. Tenemos más de 200 mil seguidores. En nuestro fan page, sobre 100 mil”.

La segunda fase del proyecto considera un receptor portátil -que cuesta $30 mil- y que recibe la señal y la da a conocer. Estará a la venta en agosto.