Tras las acreditaciones en calidad obtenidas por los hospitales de Traiguén y Collipulli el pasado mes de noviembre, el Servicio de Salud Araucanía Norte, SSAN, puso fin al objetivo planteado el año 2014 y que buscaba acreditar a los siete hospitales que componen la Red de Salud de la Provincia de Malleco.
Así lo dio a conocer este martes el director del SSAN, Cristian Mignolet, quien tras sostener un desayuno con los directores de los siete hospitales de la Red y sus respectivos equipos de acreditación, dio a la prensa angolina los alcances que este logro tiene para la salud pública de toda la Provincia de Malleco.
TAREA CUMPLIDA
“Hemos cumplido una meta importante desde el punto de vista de la gestión de este Servicio, que entre sus metas se propuso el acreditar los hospitales de la red asistencial del Servicio de Salud Araucanía Norte. (…) Al inicio fue una tarea compleja, difícil, pero se empezaron a estructurar los equipos de trabajo -que en algunos casos ya venían trabajando hacia algún tiempo- y finalmente se pudo concretar el objetivo, los que hoy día nos tiene muy conformes”, precisó Mignolet.
De esta forma el director del SSAN añadió que el hecho de que estos hospitales se encuentren acreditados significa que cuentan con “un piso mínimo con respecto a lo que estos puede realizar desde el punto de vista de las garantías Auge, lo que especifica que el hospital en función de este piso a trabajar define protocolos de atención en diferentes áreas, por lo que hoy día un hospital acreditado es mucho más seguro que otro que no lo esté”, añadió.
EL CAMINO A LA ACREDITACIÓN
Para realizar esta tarea el SSAN, constituyó un equipo asesor que fue acompañando a los hospitales en este proceso, teniendo la tarea de revisar la documentación que iban generando los hospitales para construir sus protocolos, y también ir fijando los cronogramas para ir cumpliendo los tiempos fijados por la dirección de servicio.
De esta manera para obtener la calidad de acreditados, todos los hospitales de la Red tuvieron que someterse a un proceso de evaluación con objeto de verificar el cumplimiento de un conjunto de estándares fijados y normados por el Ministerio de Salud.
Por medio de un sorteo aleatorio la Superintendencia de Salud designó una entidad acreditadora, que evaluó los nueve ámbitos que comprende la certificación, siendo estos: el respeto a la dignidad del paciente, la gestión de calidad, la gestión clínica, el acceso, oportunidad y continuidad de la atención; las competencias del recurso humano, los registros, la seguridad del equipamiento, la seguridad de las instalaciones y los servicios de apoyo.