Seremi de las Culturas denunció ante el Consejo de Monumentos Nacionales los daños ocasionados a sitio histórico de Angol

Arqueólogo viajará hasta la capital de Malleco para emitir un informe sobre lo sucedido.

La seremi de las Culturas en La Araucanía, Mariela Silva, anunció que se interpuso una denuncia ante el Consejo de Monumentos Nacionales, por los daños que observó el vecino Juan Hernández, del Comité Ambiental Local de Angol y que afectaron a los restos del fuerte Cancura, ubicado junto a la ruta que une la capital de Malleco con Collipulli.

Tras la información difundida este lunes en Clave9.cl y a diferencia de lo ocurrido en Angol, donde curiosamente, ninguna autoridad de la zona se ha pronunciado sobre lo sucedido al fuerte, los daños al sitio histórico han causado amplia repercusión en distintos ámbitos ligados a la historia y la cultura en Temuco.

La primera medida la anunció precisamente la citada seremi, en conversación con la periodista Silvia Paillán a través del programa radial Informe Araucanía, adelantando que al enterarse por este diario sobre la preocupación vecinal que existe en Angol ante las obras de tala de árboles y los daños causados a algunos de los fosos del fuerte, donde se estarían efectuando movimientos de tierra, decidió actuar de oficio, estampando una denuncia ante el Consejo de Monumentos Nacionales, instancia que enviará a un arqueólogo para que se constituya en el lugar y emita un informe de la situación, con la finalidad de que se adopten las medidas correspondientes.

“Es difícil enterarse de lo que ocurre en Angol, debido a la lejanía, pero en este caso nos enteramos a través del medio electrónico y lo que decidimos fue denunciar ante el Consejo de Monumentos Nacionales para que se constituya un arqueólogo a revisar la situación en terreno”, afirmó la seremi, agregando que “la información que manejo es que de ese predio hay un paño menor que corresponde a la municipalidad y el restante de un particular que se lo vendió a un tercero, que estaría haciendo movimiento de tierra y habría echado abajo árboles, y por ello decidimos interponer la denuncia ante el Consejo de Monumentos Nacionales”.

La seremi de las Culturas explicó que otra de las dificultades con que se enfrenta cuando se producen este tipo de situaciones que afectan a lugares históricos de la región, es que el Consejo de Monumentos Nacionales no mantiene oficinas en La Araucanía y las más cercanas funcionan en Biobío y Los Ríos. “Esto es complejo para los ciudadanos, para tener más cercanía para efectuar estas denuncias. Ahora se llamó a concurso para dotar de un profesional a esta región, a quien se le habilitará una oficina en el Servicio Nacional del Patrimonio, y esperamos que este profesional se preocupe de los que nos pasa como región”.

Finalmente, la seremi efectuó un llamado a los habitantes de la Región de La Araucanía, a denunciar ante esta seremía sobre cualquier tipo de situación que afecte a los lugares patrimoniales. “Tal como ocurrió en este caso puntual del fuerte, donde nosotros, por el solo ministerio de la ley, podemos articular la denuncia, ya que pueden producirse hallazgos arqueológicos que debemos resguardar”.

“Lo primero era establecer si el espacio era privado o no, porque cuando es privado debemos oficiar a la gobernación para que se nos permita la entrada con la fuerza pública, pero en este caso se nos aclaró que parte del terreno fue entregado a la municipalidad, entonces es más fácil que entre un arqueólogo, pues no requiere del permiso de un particular”, puntualizó.

INACCIÓN LOCAL
Entre vecinos y algunos comunicadores angolinos ha llamado la atención de que en los últimos meses se han denunciado intervenciones no solo al patrimonio histórico de Angol, sino también en ríos a manos de particulares y que pese a ello, la respuesta de las autoridades locales ha sido menor y muy distinta a las que se producen en ciudades más grandes cuando ocurren situaciones similares.

Ejemplo de ello fue el caso del río Malleco, en el popular balneario de La Arcadia, donde se denunció que camiones utilizan el lecho como camino para acceder a un sector donde se realizan obras.

Acompañando incluso fotografías, los vecinos han dado cuenta del paso de los camiones por el medio del cauce, lo que a ojos de los lugareños, ha ocasionado daños al ecosistema, situación en que el municipio se limitó a anunciar que solicitaría un informe a la Dirección de Obras Hidráulicas. También se denunciaron presuntas obras no autorizadas en el río Picoiquén, donde el municipio respondió que no se tenía conocimiento de aquello.