La PDI investiga el ataque que sufrió una antena de telecomunicaciones de la empresa eólica WPD, la cual había sido cedida hace algún tiempo a una agrícola que la utilizaba para poder realizar comunicaciones y obtener internet en sus dependencias.
El hecho trascendió solamente este miércoles, pero habría ocurrido en la noche del domingo 3 de marzo, cerca de las 23:00 horas, cuando un grupo indeterminado de personas, llegaron hasta la parcela 25 del sector Surco y Semilla de Collipulli, donde derribaron la torre de telecomunicaciones que era utilizada por la empresa forestal y agrícola La Selva.
Según lo relatado por el comisario encargado de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales de la PDI de Angol, Alejandro Pino, los responsables del hecho abrieron la reja de protección de la torre, soltaron los pernos de anclaje al suelo y uno de los nueve tensores de los vientos, lo que originó su caída, destruyéndose por completo.
“La torre, de gran altura, que era utilizada actualmente para temas de telecomunicaciones fue derribada intencionalmente, toda vez que sus pernos de anclaje fueron soltados por terceros. El dueño de la empresa forestal a quien le servía esta antena, se percató en horas de la noche que no tenía señal de teléfono ni de internet y a la mañana siguiente, al realizar un recorrido por la parcela se percató que ésta se encontraba en el suelo”, explicó el detective.
AVALÚO
Según información entregada por Forestal La Selva, el avalúo de la torre y los implementos que daban señal de internet al fundo lo hizo en $37 millones, existiendo seguros comprometidos con una empresa extranjera, de la cual se ignoran antecedentes.
El fiscal de turno de Collipulli, tras tomar conocimiento del hecho, instruyó la presencia de personal de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (Bipe) de la PDI en el lugar, quienes realizaron las pericias correspondientes en torno a la situación, tratando de encontrar evidencia que pudiera vincular a alguien con este hecho.
Por Rodrigo Zurita.
