Carabineros de la Primera Comisaría de Angol detuvieron a dos sujetos tras un espectacular operativo que incluyó una persecución policial por la avenida O’ Higgins de l, la cual se inició en el estacionamiento de supermercados Unimarc, luego que los sujetos robaran especies de un vehículo y finalizó frente al monumento al salto de Alberto Larraguibel Morales, cuando el vehículo policial logró cerrarle el paso a la camioneta en la que huían los delincuentes.
El inusual operativo policial tuvo lugar el lunes alrededor de las 16:30 horas y se inició luego que el público y clientes del supermercado dieran aviso sobre unos sujetos que se encontraban robando especies y artículos de los vehículos estacionados en el sector.
Rápidamente Carabineros se trasladó hasta el lugar logrando ubicar la camioneta en la cual se encontraban dos personas quienes al percatarse de la presencia policial huyeron por la avenida en dirección a Huequén a gran velocidad, siendo perseguidos por Carabineros.
La persecución policial sólo duró unos minutos gracias a la pericia del conductor del vehículo de Carabineros quien rápidamente les dio alcance y posteriormente les cerró el paso para lograr su captura. Cabe señalar que durante su huida los delincuentes lanzaron varios objetos por las ventanas del vehículo, los que habrían sido sustraídos del móvil atracado.
DENUNCIA
El mayor Juan González, comisario de Carabineros de Angol, manifestó que la captura de estos delincuentes se debió en gran parte a la rápida denuncia de parte de los testigos quienes llamaron al nivel 133 y dieron a conocer la situación.
“La tarde de este lunes se recibió una llamada a nivel 133 de personas que se encontraban en el estacionamiento del supermercado Unimarc, ubicado en la avenida, quienes daban cuenta de unos sujetos a bordo de una camioneta que se encontrarían sustrayendo especies del interior de un vehículo. Inmediatamente, Carabineros se hizo presente en el lugar logrando ubicar el vehículo descrito el que al ver a Carabineros se dio a la fuga siendo perseguido y capturado por los efectivos policiales. Tras la captura se pudo conocer que a bordo del vehículo iban dos personas, uno identificado con las iniciales B.A.A.V.O de 28 años, con domicilio en Angol, quien registraba 18 detenciones anteriores y otro identificado con las iniciales E.J.C.T. de 19 años con domicilio en Temuco, quien tan solo registraba una detención anterior. Ambos fueron puestos a disposición del Tribunal de Garantía para su control de detención”.
De igual forma, se conocieron antecedentes que dieron cuenta que el vehículo en el cual se trasladaban estos dos sujetos, una camioneta Nissan Terrano, color burdeos, doble cabina, había sido adquirido de forma fraudulenta en Traiguén.
RELATO
Cecilia Oliva, víctima del robo, relató que “llegué al estacionamiento del súper y me estacioné frente a la farmacia porque iba al cajero. Me di cuenta que al lado mío estaba esta camioneta con estos tipos, pero no me llamaron mayormente la atención. Me acompañaba mi hijo de 12 años y mi otro niño de cinco años. Ingresamos al cajero y salimos de ahí en dos minutos. Luego ingresé al supermercado para ver el precio de los paños y ahí me habré demorado otros dos minutos y regresamos al auto. Al subirme me acordé que había dejado el celular en el asiento y lo comencé a buscar, por los asientos y debajo de ellos, sin saber que había pasado y bajo la mirada de los sujetos que seguían al lado mío. En eso llegó Carabineros y estos tipos salen rápidamente y huyen de la policía. Para nosotros eso fue sorprendente e incluso los quedamos mirando, cuando en ese momento la gente se acercó a nosotros y nos comunicaron que mi vehículo había sido abierto y que nos habían sacado el celular y un bolso, que después supimos que se trataba de la mochila del colegio de mi hijo”.
Cecilia, quien es dueña de una Chevrolet Captiva, no se había percatado que los sujetos habían destruido la manilla de la puerta del copiloto para ingresar y sustraer estas especies, las que posteriormente lanzaron por la ventana mientras eran perseguidos por Carabineros.
“Lo que más siento es los cuadernos de mi hijo que los destruyeron, pero agradezco que a nosotros no nos pasara nada”, sentenció.
Se investiga además si había más personas involucradas en el ilícito.
Por Rodrigo Zurita.
